fin baja maternal qué hacer con el bebé

Fin de la baja maternal, ¿Y ahora qué opciones tengo? Escuela infantil, madres de día...

Mimuselina
16 semanas, con un bebé que tiene apenas 112 días, y zas... ¡adiós a la baja maternal! A las mamás nos toca volver al trabajo después de una baja por maternidad digamos educadamente breve e insuficiente (aunque sumemos vacaciones, días de lactancia...). Es entonces cuando nos planteamos esa "conciliación" a veces imposible. Fin de la baja maternal, ¿ahora qué hago? ¿Qué opciones tengo? ¿Guardería? ¿Abuelos? ¿Mamás de día? La baja maternal se queda muy corta, pasa volando y el bebé es aún muy pequeño cuando la reincorporación al trabajo por parte de la madre debe producirse. De hecho ni llega a los 6 meses que recomienda la Organización Mundial de la Salud en los que se debería alimentar al bebé sólo de leche. ¿Cómo hace una mamá con un bebé lactante que quiere dar el pecho hasta los 6 meses o más y que a los 4 se tiene que ir a trabajar?

Fin de la baja maternal ¿Qué opciones tengo? ¿Cómo lo hago?

Como mujer y madre te enfrentas a muchas encrucijadas: cómo voy a compaginar la crianza con el trabajo, los horarios, las rutinas... ¿Excedencias? ¿Reducción de jornada? ¿Y si renuncio a mi trabajo? ¿Podemos prescindir del suelo o de una parte de él? Esto puede ser un lujo en la situación en la que vivimos hoy día. Por no hablar de lo que supone salir del ámbito y el mercado laboral para luego poder volver a entrar. Un movimiento arriesgado con un techo de cristal que nos pesa como una losa como mujeres. Elijamos la opción que elijamos no nos vamos a librar del sentimiento de culpa y de abandono y de la angustia que supone tener que dejar a un bebé tan pequeño y separarse de él. Ese sentimiento pesa mucho las primeras separaciones entre madre e hij@. Aunque es cierto que los bebés se acostumbrar rápido a las nuevas situaciones y se adaptan con facilidad pasados unos días. Por ello es importante el apoyo emocional de la pareja y de la familia para que toda esta situación se sobrelleve de la mejor manera posible para todos.
1.- La baja del padre Antes de nada, si habéis sido mamás este 2021 sabéis que la baja paternal se ha equiparado este año con la baja maternal. No voy a profundizar en este caso ni en este momento sobre este tema, tan sólo comentar que aunque es estupendo que los padres tengan una baja amplia para encargarse de sus hijos, la madre sigue teniendo unas tareas propias que el padre no puede suplir y que en su baja maternal apenas puede desarrollar. Está muy bien intentar igualar derechos y opciones pero igual habría que plantearse revisar las condiciones de la baja de la mamá, ahí lo dejamos, por si nos queréis dar vuestras opiniones. Ya volveremos sobre este punto, pero es cierto que una vez que a la madre se le acaba la baja que el padre la pueda coger a continuación es una de las opciones que tenemos para dejar a los bebés. Después de unos días obligados y consecutivos nada más nacer el bebé, el padre puede disfrutar de sus semanas de baja más adelante y muchos la guardan para compaginarse con la mami cuando ésta se incorpore a sus quehaceres laborales. Por otro lado, dejo otra reflexión, ya que me he encontrado en estos últimos tiempos con padres que han querido cogerse la baja y que desde las empresas no se lo han puesto nada fácil y no lo entienden... Otros que por miedo a represalias o incomprensión de sus jefes, ni han reclamado su baja. Es muy triste, pero muy cierto. ¿Os ha pasado? ¿Tenéis algún caso cercano? Así se retrasaría por ejemplo el tenerlo que dejar en una guardería, con algún extraño o a los abuelos. 2.- Abuelos Cuando con los días de la mami se llega hasta los 4 mesecitos hay que ir planteándose desde que nacen las distintas opciones que podemos tener. Si no pudiésemos recurrir al padre por lo que os comentaba en el epígrafe anterior, tendríamos que buscar alternativas. La primera que se nos viene a la cabeza son los abuelos. ¿Con quién mejor iban a estar los niños que con familiares directos? ¿Quién los iba a cuidar mejor y a atender con toda su alma y su cariño que los abuelos? Muchos padres recurren a sus padres, es decir a los abuelos del bebé para que se ocupen de él mientras ellos cumplen el horario laboral (otro tema el de los horarios imposibles al que ya volveremos en algún otro post porque los malabares a hacer son increíbles gracias a estas jornadas de trabajo que acaban tan tarde...) Pero esta opción no siempre es factible, o bien porque viváis en ciudades distintas a donde residen los abuelos, o bien porque sean mayores, porque no puedan encargarse de ellos, puede que incluso algunos todavía trabajen y no estén jubilados. En otras ocasiones pueden no ser los únicos nietos de los que se ocupen y no pueden tener una guardería en casa para todos los nietos... ¿Entonces qué? ¿Con quién dejamos a nuestro bebé cuando tenemos que incorporarnos al trabajo tras la baja maternal?
3.- Escuela infantil
El mundo de las escuelas infantiles o guarderías es importante conocerlo y barajar la opción desde mucho antes del momento en el que tenga que producirse. Salvo que quieras o tengas que llevarlo a una guardería privada en la que pudieras ir en cualquier momento, hay que tener en cuenta plazos de solicitud de plaza mucho antes, sobre todo para las guarderías públicas.
Conviene que si mientras estás incluso embarazada ya sabéis que vuestra opción va a tener que ser la guardería, vayáis mirando las opciones que tenéis. Públicas o privadas, más cerca de casa, por horarios... Hay que empezar muchos meses antes, así que no desesperéis pero tenedlo en cuenta no sea que cuando queráis pensarlo y el bebé tenga 4 meses y tengáis que incorporaos, no encontréis plazas ni dónde llevarlos.
Consejo que os dejo ya que con Nico nos pasó, pecamos de ingénuos y tuvimos que tirar de abuelos hasta que pudimos conseguir plaza en la guardería para el curso siguiente, fueron unos meses, pero... se complicó todo bastante. Con Valería ya habíamos aprendido y ahora la situación con Gabriela y la ola de covid nos está obligando a hacer las coberturas laborales de otra manera...
4.- Madres de día
Este modelo está ganando cada vez más terreno en España como ya lo hace en Europa, y se convierte en una alternativa a las escuelas infantiles.
¿Qué son las madres de día? Son educadoras con formación propia en educación infantil que cuidan en sus casas a un máximo de tres-cuatro bebés. Estas madres de día son profesionales (maestras, pedagogas, psicólogas infantiles, con formación en atención a la primera infancia), es decir no es una persona cualquiera que monta una mini guardería en casa. Es algo que además está regulado.
Una de las diferencias con las escuelas infantiles es quizá el ambiente más personal, familiar y una atención más cercana de los bebés. Al ser muchos menos por "clase-casa" la atención es más directa.
El horario de trabajo de las madres de día se adapta al de los padres trabajadores para poder compaginar el fin de la baja maternal y la incorporación al mercado laboral tras dar a luz, con la crianza del bebé. Las madres de día basan su ideal de trabajo en el apego, en el cariño en la educación y crianza de estos bebés.
Tampoco es una canguro, es decir, no sólo lo vigilaría, sino que estas madres de día se encargan, como en las escuelas infantiles, de su cuidado, sí, pero también de su evolución, desarrollo, educación, con un sistema formativo y educativo según los meses de cada bebé.
En España no existe una normativa muy clara aún sobre las madres de día aunque cada vez son más. La mayoría suelen emplear métodos o modelos pedagógicos como Waldorf o Montessori que tan de moda está entre los padres de hoy en día, fomentando que el niño juegue a lo que quiera y le estimule cuando quieras y necesite. Muchos padres confían en estos métodos en lugar de los que emplean en muchas escuelas infantiles clásicas y tradicionales donde puede haber hasta 8 niños menores de 1 año e incluso entre 16-20 niños entre los 2 y 3 años. Existen numerosas asociaciones de Madres de día donde conseguir contactos, teléfonos e informaos de esta alternativa, como por ejemplo la Asociación de Madres de día de Madrid, AMADIMA. Buscad por vuestra zona por si existe esta opción.

Supervivencia emocional para incoporarse al trabajo tras el fin de la baja maternal

Cuando nace tu bebé tu vida da un vuelco y las 24 horas de tu día a día son para él, no piensas en nada más... y de repente, te tienes que ir a trabajar... es un momento duro, complicado, al que unir el reto logístico de compaginarlo todo y tu situación sentimental que no es nada buena. A veces, incluso mujeres que adoraban su profesión o trabajo, terminan por odiarlo por este maremoto de sentimientos. Estas emociones negativas se ven incrementadas por el cansancio acumulado, noches en las que apenas se duerme con el bebé, hormonas, nuevas rutinas, incertidumbre, ansiedad, culpa... La idea de separarte de tu hijo te impide que estés bien en el trabajo, te agobia y puede incluso bloquearte. Conciliar, que bien suena la palabra si pudiera ser verdad... No somos supermujeres, aunque es verdad que toda mamá es una súper mujer, pero no tenemos por qué autoexigirnos llegar a todo y perfectas en todo. Somos humanas.

Consejos para la vuelta al trabajo tras el fin de la baja de maternidad

Organización: es importante adaptarse a las nuevas circunstancias y probablemente tendréis que volver a organizar rutinas distintas a las de los meses de baja. Horarios para dejar a los niños, entrar y salir de casa, recogerlos, alimentación... Adiós al sentimiento de culpa: Es lo que hay. Hay que trabajar. Y tu bebé va a estar bien. Seguro que la opción que hayas elegido para quedarse con él es la mejor para él, para ti y vuestras circunstancias, así que cuanto antes te quites esa ansiedad y ese sentimiento de culpa mejor para ti. Descanso: Procura descansar lo que puedas porque al ritmo de vida que exige la maternidad con un bebé se suma ahora el estrés laboral. Deja los problemas de trabajo al margen, no te los lleves a casa y le trasmitas esos nervios al bebé. Autocuidado: Busca algo de tiempo para ti, para desconectar y conectar contigo, un baño, un paseo, una clase de una hora de pilates o yoga a la semana... y no te sientas culpable por esto también, todo suma y ayuda a que estemos mejor como madres y mujeres.