Beneficios de la lactancia materna

julio 17, 2024 Mimuselina

Nunca me canso de hablar de la lactancia materna a amigas y conocidas… Es un tema que me encanta y del que si tod@s tuviéramos más información podríamos mejorar muchas cosas… Entre otras, reduciríamos las visitas a los pediatras, la desinformación y la inexactitud de datos que circulan sobre la lactancia. En fin lo de los mitos da para mucho también…

Aún así, desde Mimuselina, somos totalmente tolerantes, y aunque en mi caso haya apostado y crea en la lactancia materna, no vamos a estigmatizar ni criticar a aquellas personas que por las circunstancias que sean decidan otro tipo de alimentación para su bebé.

10 beneficios de la lactancia materna

1 - Alimento ideal. Cambia según las necesidades del bebé

La leche materna es esencial para un sano crecimiento y desarrollo del bebé. La leche materna cambia según las necesidades de tu bebé, cambia de composición y nutrientes a lo largo del día y de los meses durante el crecimiento del pequeño (primero tu leche será calostro, luego leche de transición y luego leche madura). Pero no sólo cambia en composición también varía en cuanto a producción. El tamaño del estómago de un bebé de 1 día no es el mismo tamaño que un bebé de 5 días.

- Estos gráficos facilitados por la liga de la leche te muestran el tamaño real de los estómagos de un bebé, por lo tanto hay que intentar que no te afecte el que tu madre/suegra/hermana/enfermera te digan «se está quedando con hambre» para meterle un biberón. Lo mejor es que esté el máximo tiempo posible en la teta, quizá no saque más pero tu producción se irá regulando si hay demanda.

2- Más protección frente a infecciones y alergias

Un bebé que mama está más protegido/inmunizado frente a infecciones y alergias. La leche materna contiene anticuerpos que ayudan a proteger al bebe no sólo los primeros meses de vida, sino también evitará enfermedades de tu hijo en el futuro. La leche materna podría ser considerada la mejor vacuna natural para tus hijos.

3 - Un bebé lactante aceptará mejor los nuevos sabores

Un bebé que mama, está acostumbrado a la variedad de sabores (en cada toma el sabor de la leche materna varía en función de la dieta de su madre. La leche de fórmula siempre va a tener el mismo sabor día a tras día) Por eso el bebé lactante será más tolerante en la introducción de nuevos alimentos, sabores y a diversificar el sentido del gusto.

4 - Vínculo afectivo mayor = menos depresión postparto

Fortalece el vínculo afectivo entre el bebé y la mamá disminuyendo la depresión post-parto. Como instinto de supervivencia el recién nacido busca el contacto permanente de la madre, calor, cobijo y alimentación. Con la lactancia se cubre además de la parte física una parte emocional, se crea un fuerte vínculo. Dar de mamar se convierte día tras día en un momento íntimo donde surge el amor incondicional entre una madre y un hijo. Ese amor incondicional hace que la madre se vuelque en su cuidado sin importar nada, el cerebro de la mamá es feliz si ve al bebé feliz y por tanto caer en un círculo de negatividad es más complicado.

5 - Menos índice de síndrome de muerte súbita

Éste es un tema complicado, pero según un estudio en 18 países realizado por la RevistaPediatrics, sostiene que los niños amamantados despiertan más fácilmente del sueño activo que los niños alimentados con fórmula. Se supone que se despiertan más a menudo para lactar y la mamá está inconscientemente más alerta. Para más info más completa sobre el estudio, pincha aquí.

6 - Reduce el riesgo de cáncer de mama o de ovarios

Cuanto más tiempo de mamar una madre, menos riesgo de padecer un cáncer de pecho y de útero. Se puede reducir el índice de riesgo en casi dos tercios. A mayor número de hijos y meses de lactancia el porcentaje sigue decreciendo.

7 - Dar el pecho es comodidad

Es ofrecer el alimento ideal siempre disponible a la temperatura perfecta. Dar de mamar es rápido (no tienes que preparar nada), es higiénico (no tienes que lavar nada ni antes ni después) y medio-ambientalmente sostenible (no hay gasto de jabón, agua, envases…). No tienes que preparar biberones, limpiarlos, esperar a que se enfríe porque quema, llevar mil cachivaches para prepararlo o buscar un bar para calentarlo si estás fuera de casa. Por la noche aún mejor, si das el pecho te desvelas lo justo para darle de mamar, pero gracias a la prolactina que segregas, haces que tu calidad del sueño sea mejor y te duermas más fácilmente.

8 - Mejor formación de la boca

Al succionar hay un mejor desarrollo de los músculos maxilofaciales y se produce una mejor oclusión dentaria. Los chupetes, tetinas de biberón o el hábito de meterse el dedo en la boca hace que se favorezcan hábitos que condicionen la postura de dientes y mandíbula pudiendo provocar deformaciones con el paso de los años.

9 - Menos cólicos del lactante

La leche materna es mucho más fácil de digerir para el bebé y al mamar el bebé no coge tanto aire como con un biberón y por tanto reduce de cólicos del lactante. La leche materna es una protección contra infecciones estomacales. Con la leche de fórmula el bebé siempre toma más cantidad que succionando del pecho, y en una toma «excesiva» la digestión es más pesada y el bebé tenderá a regurgitar.

10 - Experiencia maravillosa y gratificante

Aparte de las razones anteriores y muchas más para mí ha sido una experiencia única, intensa, preciosa y llena de amor que repetiré con mis hijos futuros. Me siento orgullosísima de haber dado pecho en exclusiva hasta los 6 meses y con alimentación complementaria hasta sus 15 meses con todos mis hijos.

Hasta aquí los beneficios, pero insisto que existen muchísimos más, y recordaos que debéis tener una buena alimentación como mamás y que según la OMS (Organización Mundial de la Salud) la lactancia materna debería ser exclusiva hasta los 6 meses.