Que el más pequeño de la casa tenga noches placenteras y reparadoras que resulten fundamentales para su crecimiento y desarrollo, es una de las cosas que más nos preocupa en la etapa en la que todavía requiere esos cuidados las 24 horas del día. Durante los primeros seis meses de vida , los bebes ocupan al menos 14 horas en dormir.
Por esto resulta fundamental la elección de la superficie adecuada para que el bebé tenga un sueño reparador. El descanso del bebé es de vital importancia para contribuir al correcto desarrollo del niño y un buen colchón de cuna es básico para esto.
Es por ello que recomendamos que no plantearse la compra del colchón de cuna como “un producto más”. Piensa que tu bebé pasará durmiendo y descansando unas 14 horas al día, durante un período prolongado (alrededor de 2-3 años) y que de su elección dependerá la calidad de su descanso. Por eso hay que dedicarle la importancia que merece.
Con nuestro bebé en las condiciones ideales para disfrutar de un sueño confortable y reparador, no es menos importante que nosotros podamos descansar también correctamente y estar frescos al día siguiente para dedicarle todo nuestro cariño y atenciones. El Nuevo colchón Viscolatex de Lo Mónaco es la superficie ideal para que los mayores tengamos también ese merecido descanso.
Pero para que te quedes tranquilo y porque tu bebé es lo más importante aquí te dejamos las características básicas que debe reunir todo colchón de cuna para garantizar el mejor descanso a tu bebé.
Transpirabilidad
Debe ser lo más transpirable posible, lo que evita la concentración de CO2, y favorece la circulación de aire en el entorno del bebé. Esto ayudará a reduciendo el riesgo del síndrome de lo que conocemos como muerte súbita del lactante. En el mercado existen colchones de avanzada tecnología que garantizan una óptima aireación. Un colchón de cuna transpirable, permite evacuar la humedad en caso de mojado accidental o en los casos de ambientes húmedos. Además ayuda a evitar el sobrecalentamiento, mejora el confort del bebé, sobre todo en los meses de verano.
Seguridad
El colchón debe de ajustarse perfectamente a la cuna, para evitar así que queden huecos entre el colchón y los laterales de la cuna. Esto evitará que tanto su cuerpo como su cabecita puedan quedar atrapados entre el colchón y los laterales de la cuna. Existen colchones en el mercado con refuerzos en el perímetro que hacen que sus bordes sean más firmes y ayuden así a mantener el bebé en el centro evitando que pueda acercarse a los laterales de la cuna.
Es exigible en materia de seguridad que todos los materiales con los que esté fabricado el colchón tengan las certificaciones que garanticen que no existe ningún riesgo ni son nocivos para el bebé.
Comodidad y confort
Además de la higiene y la seguridad, el colchón para nuestro bebé debe ser cómodo para que el descanso sea óptimo. Si resulta excesivamente duro o a la inversa, pueden resultarle incómodos, además de no contribuir correctamente a su desarrollo. La recomendación es escoger un colchón que combine cierta dureza con la adaptabilidad de los materiales a su cuerpo. Sostén suficiente pero suavidad a la vez para el bebé.
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