Coronavirus en playas y piscinas: ¿Cómo se comporta la covid19 en el cloro y el agua salada? ¿Dónde es más seguro bañarse?

Ha llegado el verano y después de los meses de confinamiento este año tenemos aún más ganas de sol, agua, vacaciones, relax y desconexión, pero nos asaltan mil dudas sobre el comportamiento del coronavirus en playas y piscinas.

Es normal que tengamos miedos e incertidumbre con respecto a la "nueva normalidad" por eso mejor recurrir a fuentes oficiales y sobre todo informarnos lo máximo posible para saber ¿cómo se comporta la covid19 en el cloro y en el agua salada? ¿Dónde es más seguro bañarse?

“En actividades recreativas, la infección por SARS-CoV-2 por contacto con el agua de condiciones estándar para el baño es muy poco probable”. A esta conclusión han llegado en el informe del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de lo que deducimos y nos podemos quedar tranquilos que el contagio dentro del agua es prácticamente imposible.

Según este informe, las posibles vías de contagio del virus Covid19 en playas, piscinas, ríos… es a través de secreciones respiratorias generadas por la tos, los estornudos y el contacto de persona a persona en el exterior. Los principales problemas serían:

• las aglomeraciones fuera del agua
• la falta de distancia de seguridad que pone en riesgo la posibilidad de contagio.

Coronavirus en playas y piscinas

Coronavirus en piscinas

En el caso de las piscinas, el uso del cloro y de agentes desinfectantes para evitar la contaminación microbiana de las aguas, inactivaría el virus SARS-CoV-2.

"No hay evidencia de que el COVID-19 pueda transmitirse a través del agua en piscinas, jacuzzis, spas o áreas de juego con agua", con esta frase el CSIC cita al Centro de Control de Enfermedades de EEUU, advirtiendo de la importancia de mantener los niveles de cloro en las piscinas. Si se mantiene la cloración del agua en estándares legales marcados por las normas que regulan la materia no habría problemas.

El nivel de cloro recomendado es de entre 1 y 3 mg/L, suficientes para la inactivación del virus y para reducir los riesgos de contaminación en el baño. Así pues, la clave de la seguridad en las piscinas estaría en mantener el nivel del cloro, realizando monitorizaciones correctas, porque el nivel del cloro no es fijo, puede variar y por eso debe estar muy vigilado para que no baje de estos niveles mínimos que garantizan la destrucción del virus.

El cloro puede bajar de concentración por el sol, por el número de bañistas... Habría que revisar el agua al menos entre 4 y 5 veces al día, no sólo al inicio y cierre de las instalaciones. La solución no está en añadir más cloro, porque hay unos niveles mínimos para que no afecte a la salud de las personas, ni piquen los ojos, ni se irrite la piel...

Coronavirus en spas y saunas

En los spa, los aerosoles generados en un balneario, por ejemplo, o en una instalación de aguas medicinales, tienen los mismos principios de desinfección que las aguas del baño de dichas instalaciones, por lo que el virus quedaría igualmente desactivado.

En el caso de las saunas y baños de vapor, las altas temperaturas, superiores a 60º, hacen que la supervivencia del virus se reduzca.

Coronavirus en playas, comportamiento del covid-19 en agua salada

En el agua del mar influyen dos factores:

1. el efecto de dilución
2. y la presencia de sal

La conjunción de ambos sería más que suficiente para inactivar la presencia del SARS-CoV-2 en el agua del mar. Lo mismo le sucede a otros virus de la familia de los coronavirus. No es que haya un estudio específico concreto sobre el covid19 en particular, aún no, pero por evidencias del comportamiento de otros virus del mismo origen y morfología se puede llegar a esta conclusión.

Coronavirus en ríos, lagos y pozas de agua dulce

El problema en estos puntos es que es agua dulce, no tratada, como en los casos anteriores (las piscinas con el cloro o la salinidad propia del mar). Lo mejor es extremar las medidas de precaución para evitar aglomeraciones, siendo éstos los medios acuáticos más desaconsejables con respecto a las alternativas anteriores.

Esto nos recomiendan desde el CSIC, por lo que mejor evitarlos ante la no certeza de que el virus pueda morir en aguas dulces.

¿Qué pasa por ejemplo con la arena de la playa? ¿Cómo se comporta en este escenario el covid19?

Una vez que sabemos que en el agua salada el virus tiene muy pocas posibilidades de sobrevivir, nos planteamos más dudas de cara a ir a la playa... ¿qué permanencia tiene si la hubiera, el virus en la arena? ¿Es como en otras superficies en las que día a día tenemos que extremar las precauciones?

No hay estudios concretos, pero pudiera ser que la acción conjunta de la sal del agua del mar, la radiación ultravioleta solar y las altas temperaturas que pueden alcanzar los granitos de arena, serían factores propicios para la inactivación del virus.

Es cierto que contagiarse en el agua con las evidencias que tienen los expertos hasta ahora es poco probable, el problema está en que estas actividades de ocio y recreo suponen un relajamiento y una pérdida de las medidas recomendadas de distanciamiento social.

Hay que recordar esto para poder seguir disfrutando del verano a pesar de la presencia del virus (con la que tenemos que aprender a convivir) y al que debemos mantener a raya poniendo todos los medios que están en nuestra mano, así que ya sabéis, disfrutad pero con prudencia. Porque si en estos tiempos de coronavirus estás embarazada tendrás mil dudas más aún sobre qué hacer este verano, pero ir a la playa tiene muchos beneficios en tu caso, así que ya sabéis todos y todas:

• Mascarilla, siempre
• Distancia social
• Higiene de manos

Hazlo por ti, por todos, para que como en Y todo salió bien...

Si quieres saber más sobre el verano, la playa, el sol, las piscinas... y los bebés... sigue leyendo.