Aprende a interpretar los dibujos / garabatos de tu bebé

Alrededor de los 18 meses, es el momento en que los bebés ya empiezan a expresar sus primeras habilidades artísticas. Hay que tener en cuenta, que unos lo harán antes y otros después, pero todos realizarán sus primeros trazos en forma de garabatos, que irán evolucionando hasta que el bebé adquiera una mayor maduración psicomotora e intelectual.

Dibujar es un acto inconsciente que nos ayuda a determinar el proceso evolutivo del bebé y también puede servir, en algunas ocasiones, para detectar algún tipo de alteración psicológica, de forma temprana.

Este momento es fundamental en el desarrollo del bebé. Los primeros trazos los realizan de forma incontrolada, moviendo todo el brazo de forma impulsiva. Y aunque puedan parecer líneas inconexas y sin sentido, para ellos son verdaderas obras de arte. No hay que olvidar que es una etapa importante en el desarrollo artístico de los niños, en que los primeros garabatos irán evolucionando.

Al principio, los garabatos se realizarán de forma descontrolada, más adelante serán garabatos controlados, para terminar con garabatos con nombre. Aquí tienes una muestra de cada uno de ellos.

En esta fase el niño aún no tiene coordinación entre el cerebro, el ojo y la mano. Por ello, es bastante habitual que veas a tu bebé realizando trazos sin ningún sentido y mirando hacia otro lugar.

Es característico que coja el lápiz “a su manera”, “dibuje” presionando con fuerza el papel y moviendo todo el brazo. El movimiento les resulta placentero y esto es lo que les lleva a garabatear. A menudo, se salen de la hoja de papel sobre la que están dibujando.

Durante esta fase, deberás estar especialmente atenta para que tu pequeño artista no te decore las paredes o los muebles. ;-)

Poco a poco, irás viendo la evolución en el desarrollo artístico del bebé, y las rayas desordenadas y descontroladas, irán tomando forma.

Esto es debido a que el niño descubre una relación entre los movimientos y el control visual, sobre los trazos que realiza. ¡Empiezan a ser garabatos controlados!

Los trazos suelen ser más largos, y pueden incluir líneas rectas, circulares, o puntos. En esta etapa en la que se inicia la integración visual, la intención ya es representativa. A pesar de que nosotros no logremos reconocer qué es lo que se ha dibujado, el niño intenta plasmar una idea o pensamiento.

En esta fase, el niño ya es capaz de representar lo que ve, los trazos evolucionan hacia formas más reconocibles y el niño da nombre a sus garabatos. A pesar de que algunos trazos aún os parecerán irreconocibles, otros ya los podréis identificar con facilidad. El niño escogerá los colores y dedicará más tiempos a realizar cada forma. Esto sucede a causa de un mayor dominio motor.

Cuando finalizan las fases del garabato, se iniciará la etapa del dibujo pre-esquemático, que tendrá lugar entre los 4 y los 7 años de edad.

En esta fase, ya consiguen dibujar figuras humanas, con más o menos detalles, así como otras figuras reconocibles.

En esta fase es posible interpretar con mayor facilidad algunos aspectos de la personalidad del niño, que quedarán representados en el dibujo que ha realizado. Según los expertos, hay que prestar atención a la posición que ocupa el dibujo en la hoja de papel, si está centrado o no, los colores escogidos, la presión y la seguridad con la que se ha realizado el trazo, entre otros muchos aspectos.

La verdad es que resulta muy interesante seguir la evolución que van haciendo nuestros pequeños "grandes artistas".

Es curioso ver como desde muy pequeños algunos sienten verdadera “afición” por garabatear y después dibujar, mientras que a otros no les interesa demasiado. Es importante estimular siempre a nuestro hijos, darles total libertad para que se expresen y experimenten con todo tipo de materiales y sobre todo animarles, animarles y animarles.